CRONICA DE LAS JORNADAS CELEBRADAS POR LA FUNDANCIÓN TOMAS MORO EN EL CENTRO DE ESPIRITUALIDAD DEL SAGRADO CORAZON DE JESUS DE VALLADOLID LOS DÍAS 26 A 28 DE ABRIL DE 2024 SOBRE “HUMANISMO Y CINE”.
Por Fernando Díez Moreno
Vicepresidente de la Fundación
- El Centro de Espiritualidad del Sagrado Corazón de Jesús.
Las jornadas se han desarrollado en el “Centro de Espiritualidad del Sagrado Corazón de Jesús”, antiguo Colegio de San Ambrosio, fundado por los Jesuitas en el siglo XVI, en el que se impartían clases de gramática, filosofía y teología. En él vivieron Padres famosos y de probada virtud, como Francisco Suárez, Cardaveraz, Calatayud, Isla, entre otros. El más recordado de todos fue el Beato Bernardo de Hoyos, que llegó en 1731 y al que se reveló el Sagrado Corazón de Jesús en la iglesia primitiva, que hoy está declarada como Basílica Nacional de la Gran Promesa, en la que se le prometió: “reinaré en España y con más veneración que en otras partes”. Bernardo se constituyó en Apóstol del Corazón de Jesús para difundir la devoción por toda España, Hispanoamérica y Filipinas, consagrando toda su corta vida a este empeño apostólico, muriendo el 29 de noviembre de 1735. Tras la expulsión de la Compañía de Jesús de España, el colegio fue expropiado y su iglesia primitiva pasó a ser de jurisdicción diocesana. Posteriormente el Rey Felipe V lo entregó a los obispos escoceses para establecer en él un seminario.
Fue el arzobispo R. Gandásegui (1920-1937) quien recuperó la importancia de este lugar en un momento de gran persecución a la Iglesia en España, convirtiéndolo en “Templo Expiatorio Nacional del Sagrado Corazón”, cuya aprobación fue concedida por el Papa Pío XI en 1933, recomendándolo a todos los españoles, y siendo consagrado para esta función por el obispo D. Antonio García y García el 5 de junio de 1941, y recibiendo el nombre actual. En 1964 recibió en título de Basílica Menor.
En el año 1988, lo desocuparon los escoceses y lo adquirió la Diócesis de Valladolid en 1991 para instalar en él un centro de espiritualidad dedicado al Corazón de Jesús y a la difusión de su culto. A partir de septiembre del año 2015 se llevó a cabo
la unificación con la basílica recuperando el aspecto primitivo que conoció y vivió el Beato Bernardo.
El centro de espiritualidad fue concebido para ser la concha que custodiase “la perla preciosa” que es la basílica, lugar de la revelación del Corazón de Jesús, pudiéndose comparar con la “Casa de Betania” en la que Cristo, atendido por sus amigos, acoge a todos ofreciendo su Corazón para nuestro descanso y para crecer en su amor y conocimiento.
2. Primera conferencia. Día 26 de abril, viernes.
Una vez llegados y aposentados en el centro, y después de la cena, el presidente de la Fundación José Pardo de Santayana, dio la bienvenida a los asistentes e hizo un repaso de las actividades que se iban a desarrollar en los próximos días.
Presentó al conferenciante D. Arturo Encinas, profesor e investigador en la Facultad de Comunicación de la Universidad Francisco de Vitoria, quien disertó sobre el tema “La ficción audiovisual como ocio”.
Sostuvo que la ficción ha existido desde siempre. El Apocalipsis de S. Juan está escrito como pastor, como teólogo y como poeta. No hemos tomado en serio la formación de las personas que organizan nuestro ocio. La formación para el ocio debe ser como la formación para ser médico. Hay que tomarse en serio la ficción. En la vida humana debemos dedicar tiempo a nuestra profesión, al descanso y a aquello para lo que vivimos. Desde la escuela debemos aprender a organizar nuestro ocio. Una actividad del ocio es la oración. El ámbito de la ficción coincide con el ámbito del ocio. Consideramos el tiempo del ocio como tiempo para desconectar, pero hay que
ponerse delante de obras (cine, series, TV, etc.) que no impliquen desconectar: se debe aprovechar el tiempo del ocio como tiempo para crecer.
La ficción no debe confundirse con la mentira. La ficción es una manera de referirse a la realidad de manera distinta de la historia real. La ficción es una realidad invertida. Jesucristo hablaba en metáforas. La ficción se refiere a un tipo de actividad que no se puede explicar de otro modo. Un autor sostiene que la ficción es la síntesis de lo heterogéneo. Hay una distancia ficcional. En la ficción encontramos un relato de la vida, porque la ficción enseña a vivir. En libro de Samuel del Antiguo Testamento se relata como David se enamora de la mujer de Urías y manda a este a la guerra para que muera. El profeta Natán le reprocha a David su actuación por medio de un relato porque no podía apelar directamente a lo que el rey había hecho y, de esa manera, la situación de este se revierte. Para esto está la ficción. Hay que acercarse a la ficción con un poco de atención.
Otro ejemplo es el “Protágoras”, un diálogo de Platón. La ficción ayuda a entender la vida. No toda ficción es medicina para el alma. Hay ficciones que están delante de nosotros y que nos pueden hacer bien. Protágoras/Hipócrates/Sócrates dialogan sobre como la ficción nos ayuda a vivir. Las historias quieren convencerte de que se puede vivir de otro modo. Pero sobre el contenido de las ficciones no hay nada escrito, ni publicaciones, ni investigaciones. La comunicación y el cine están para manipular a las masas: solo se investigan los temas de la LGTBI, o los problemas de los negros, o como incrementar las audiencias. “Las enseñanzas no se pueden transportar en vasijas”. Menciona una película de un señor casado que termina uniéndose a un hombre. En la sociedad van calando ideas cada vez más escabrosas. No sabemos plantear de forma atractiva la verdad. La ficción puede ser elemento de discernimiento de la vida. Hace falta gente que se dedique a la ficción.
Una vez terminada la conferencia se desarrolló un animado coloquio en la torre del Centro.
3. Proyección de la película “Libres”. Día 27 de abril, sábado
La película “Libres” es en realidad un reportaje en el que se entrevistan a varios monjes y monjas en diversos monasterios de España, alternando los temas, en los que exponen los motivos de su vocación, la vida diaria en el monasterio o las crisis que sufren. No se mencionan los nombres de los monjes entrevistados ni el monasterio al que pertenecen. Tampoco se habla de las crisis de vocaciones.
4. Mesa redonda con Arturo Encinas (conferenciante del día anterior), Javier Lorenzo (guionista y actor de la película), y Frederik Takkenberg (Hermano Carmelita del Monasterio de S. José en las Batuecas).
A continuación de la proyección de la película tuvo lugar una mesa redonda con los tres citados. Arturo Encinas sostuvo que, a diferencia de los mundos posibles, nuestro mundo es incompleto. Umberto Ecco habla del “topic textual”. Lo que aparece en las lecturas no viene al caso con lo que aparece en los títulos, las apariencias o los lugares. Pero Jesucristo sí aparece, es un paradigma del mundo completo. Pero al no aparecer los nombres de los monjes ¿es un mundo incompleto?
Javier Lorenzo destacó cómo el Señor se hace presente en la vida de los monjes. El director de la película decía que los monjes son como los faros, pero el propósito es saber cómo son los faros. Sostuvo que, en ocasiones, ni siquiera en la Iglesia se entiende la vocación del monje. La vocación del monje es un “ser” y no un “hacer”. Se pregunta si son inútiles. El director de la película ha conseguido que se vea el rostro de Cristo en la tierra. Los monjes existen y hay que conocerlos. Expuso la idea de que hablar del monacato en general es manifestar el rostro de Cristo.
El hermano Frederik habló de que el anonimato depende del carisma de cada Orden. Había que dar testimonio porque la sociedad actual lo necesita. Habló de la vida monástica en Oriente, pero en Occidente son muy pocos. Sobre la cuestión de ser faros dice que la vida contemplativa es accesible a todos. Cuenta que un hombre de negocios visitó el monasterio y desde entonces aplicó en su empresa dos horas de silencio. La productividad aumentó. Dedicar una hora diaria al silencio es estar en el amor.
5. Segunda conferencia.
La segunda conferencia estuvo a cargo de Javier Burrieza, profesor titular de Historia Moderna de la Universidad de Valladolid. Su título fue “San Benito el Real de Valladolid, cabeza del monacato de la Monarquía”.
Comenzó haciendo una breve historia del convento de San Benito construido a finales del siglo XIV y hoy ocupado por Carmelitas. Destacó los terribles efectos de la desamortización y como hoy en día hay más monjas que monjes. Así Valladolid tenía un carácter “levítico”, pues había 46 conventos en 1601, en una ciudad que tenía entre 20.000 y 40.000 habitantes.
Recuerda que, por este centro, en el que nos encontramos, antiguo Colegio de San Ambrosio, por el que pasaron, entre otros, Francisco Suarez o el Beato Francisco de Hoyos.
El conferenciante se muestra contrario a los términos de Reforma y Contrareforma. Así en el siglo XV la reforma es de las órdenes religiosas, pues se vivía en una sociedad clericalizada. Del gran convento franciscano de San Benito, apenas queda nada. Estuvo ocupado por los Jerónimos que tuvieron un prior muy famoso: Fr. Hernando de Talavera. La Reforma quería lograr la autenticidad en la forma de vida en los Conventos, con estricta observancia de la Regla por la que se regían y por la clausura. El rigor tenía más atractivo y se trasladaba a los seglares. Menciona las procesiones de Semana Santa y las numerosas cofradías. Aparece la figura del “cristiano nuevo”, que dará lugar a la intervención de la Inquisición. San Benito el Real está dentro de Valladolid y era un monasterio, un centro de monjes benedictinos con influencia en España, Portugal y el Reino Unido, y que se había iniciado en el Alcázar, bajo cuya dependencia había diversos Prioratos. Así, por ejemplo, el monasterio de Monserrat dependía de Valladolid. Es en 1390 cuando el
Papa Clemente VII aprueba la Bula y Juan I de Castilla hace provisión de bienes. Otras características del monasterio es que se podía guardar documentos y joyas, no hablaban entre los monjes, de 1499 a 1515 compran las casas y edificios para su ampliación (es la época del gótico), el pórtico es de 1570, inicialmente era una fortaleza y una Iglesia inmensa, estaba abarrotada de altares y sepulcros, su reja es impresionante, había una hospedería para peregrinos, el retablo es de Berruguete, tenían multitud de reliquias (Cristo de la capa), es destacable la sillería del coro y, por último, tenían una propia conducción de agua potable. Sufrió los efectos de la invasión francesa en el siglo XIX y los cambios ideológicos de este siglo, incluyendo la expulsión que supuso la eliminación de la sucesión entre generaciones de monjes. Fue un desastre. Por ejemplo, se vendieron los libros de la Biblioteca. Desde 1897 está en manos de los Carmelitas Descalzos y la imagen de la Virgen del Carmen es muy venerada. Existe un Centro Josefino Europeo.
6. Explicación de la Basílica de la Gran Promesa.
Después de la comida, una de las consagradas, Magnolia, encargada de atender a los peregrinos que llegaban al Centro, nos dio una breve charla para explicarnos la Basílica de la Gran Promesa. Se refirió al antiguo Colegio de San Ambrosio, en el que nos encontramos, y como en 1731 vino el Beato Bernardo de Hoyos, que tuvo una visión de Jesucristo y como le instruyó para implantar la devoción al Corazón de Jesús, al igual que Margarita María Alacoque había hecho en Francia y, concretamente, en Paray le Monial.
En los años siguientes el Beato Bernardo pidió a Jesús que se promoviera en España el culto a su Sagrado Corazón. Bernardo era un místico y vio el Corazón de Jesús. Creía que su propio corazón estaba metido en el Sagrado Corazón y que este era capaz de transformar el corazón del hombre. El culto al Sagrado Corazón no se conocía, en aquel momento, en España, ni en Portugal, ni en el Nuevo Mundo. Jesús hizo al Beato Bernardo la promesa de que “reinaré en España y con más veneración que en otras partes”. Es la Gran Promesa y se extendió a Filipinas y a América. Reinar significa amar en los corazones y el objeto del reinado es la Eucaristía.
El Beato Bernardo escribió cartas, editó estampas y se dedicó a la predicación. En el 2 de enero de 1735 fue ordenado sacerdote. Y murió de tifus el 29 de noviembre del mismo año 1735, a los 24 años.
7. Visita al Museo Nacional de Escultura.
Una vez terminada la charla, nos trasladamos a pie a visitar el Museo Nacional de Escultura que nos dejó realmente impactados.
El museo fue fundado a mediados del siglo XIX como consecuencia de la desamortización y de la consiguiente nacionalización de sus tesoros artísticos, que fueron entregados a la tutela del Estado. Nacieron así los museos de Bellas Artes que se expandieron por todas las provincias. Uno de los primeros en constituirse fue el de Valladolid, que inauguró en 1842 y fue instalado en el Colegio de Santa Cruz. Las colecciones de referencia fueron la escultura religiosa en madera policromada, que abarcaba retablos, sillerías de coro, sepulcros, relicarios, pasos procesionales, entre otros. A ello debe añadirse los artesonados de madera que cubren sus salas con ornamentación escultórica. En un principio, el Museo exponía obras de artistas castellanos entre 1500 y 1650, como Alonso Berruguete, Felipe Vigarny, Juan de Juni, Leoni y Gregorio Fernández. También la pintura tiene un papel significativo con obras de Jorge Inglés, Antonio Moro, Rubens, Zurbarán o Luís Meléndez. En 1933 el Museo se elevó a la categoría de Nacional, reforzando su especialidad al añadirse “de Escultura”, experimentado una ampliación de sus fondos con obras de Pedro Mena o Alonso Cano y otras procedentes de Borgoña, Francia, Flandes, Italia o Alemania. En la década de los 80 se adquirieron dos edificios del siglo XVI: el Palacio de Villena y la Casa del Sol, rehabilitándose integralmente el Colegio de San Gregorio. En el año 2011 se incorporaron los fondos del Museo Nacional de Reproducciones Artísticas con 3.500 piezas.
8. Concierto de Arpa Celta.
A continuación de la visita al museo y en una de las capillas del centro de espiritualidad tuvo lugar un concierto de arpa celta a cargo de María Pilar García-Gallardo. Fue presentada por Esther Sestelo, quien destacó su condición de profesora de arpa en el Conservatorio Profesional de Música de Valladolid. Estudió piano, como primer instrumento, en el Conservatorio de Burgos, realizando estudios de arpa en Madrid y durante tres años se perfeccionó en el Curso de Arpa de la Academia de Santa Cecilia de Roma con la Profesora Elena Zaniboni. Actualmente forma parte de la Orquesta Sinfónica de Burgos y ha colaborado con numerosas orquestas españolas y extranjeras. También nos enseñó a distinguir entre arpa clásica y arpa celta. El programa del concierto estaba acorde con el lema de las jornadas, ya que interpretó hasta trece bandas sonoras de películas. En el programa repartido estaban las trece bandas sonoras, pero Esther dijo en la presentación que no estaban por orden, y que lo dejaba para que cada uno pudiese identificar la banda sonora que se
interpretaba.
Las bandas sonoras que se interpretaron fueron: El mago de Oz; Lo que el viento se llevó; Espartaco; Love story; El padrino; Memorias de África; La Misión; Los intocables; La lista de Schindler; Notting Hill; Pearl Harbor; El Señor de los Anillos; y Juego de Tronos. Fue muy aplaudida y al terminar el concierto se le entregó un ramo de flores.
9. Coloquio sobre la situación estratégica mundial en la actualidad.
Aunque fuera de programa, José Pardo de Santayana se avino a celebrar un coloquio, después de la cena, pues los asistentes tenían mucho interés en conocer su opinión sobre la situación que vive el mundo. A pesar de que el día había sido muy intenso, la torre del centro de espiritualidad estaba a rebosar y el coloquio, después de una breve exposición, tuvo especial intensidad. Se habló de la guerra de Ucrania y delas perspectivas y posibilidades inmediatas. Se habló también de la guerra Israel-Hamas. Se hizo una valoración de la situación estratégica a nivel mundial en la que cobra importancia el Sur Global. Hubo muchas preguntas que quedaron sin respuesta,
pero hubo que cortar el coloquio porque habría dado para hablar toda la noche.
10. Tercera conferencia. (Domingo 28 de abril)
La tercera conferencia de las jornadas corrió a cargo de Pablo Méndez-Monasterio, patrono de la Fundación Tomas Moro, y versó sobre El catolicismo de Tolkien.
Después de la presentación por Ignacio Velilla¸ secretario de la Fundación, tomó la palabra el conferenciante para exponer el porqué de la elección de John Ronald Reuel Tolkien como tema central de la conferencia. Pues bien, siendo el leitmotiv de estas jornadas el de Humanismo y cine, la conexión es clara: por un lado, la adaptación cinematográfica de la obra de Tolkien, concretamente, El Señor de los Anillos: el retorno del Rey, es la película más oscarizada de la Historia, solamente igualada por Titanic y Ben-Hur, con 11 Oscar; y, por otro lado, porque Tolkien era, a su manera particular, un humanista cristiano.
Desde su más tierna infancia, el catolicismo dejó una profunda huella en Tolkien, convirtiéndose en un elemento transcendental que iluminó su vida y su obra. Su visión del mundo y su creación literaria brotaron de las profundas raíces de su catolicismo, desde su concepción de la creación hasta su representación del bien y el mal, pasando por la exploración de temas como la redención y el sacrificio Tolkien, además, presenta el interés añadido que irradia su propia figura: la de un escritor, poeta, filólogo, lingüista y profesor que se convirtió en el máximo exponente del género literario de fantasía y de la novela épica o heroica de la historia reciente, llegando a ser denominado por algunos como “el HOMERO del siglo XX”.
La conferencia puso de manifiesto la importancia que el catolicismo tuvo en la vida de uno de los más influyentes escritores de nuestra era, con más de 150 millones de libros vendidos y traducido a unos 50 idiomas diferentes.
El catolicismo, como explicó el conferenciante, le llega a JRR Tolkien a través de su madre, Mabel. Además, Méndez-Monasterio reseñó la importancia del cuidado e influencia del Francis Xavier Morgan Osborne en la educación temprana de Tolkien, en el Oratorio de Birmingham.
En su testamento Mabel le confió al P. Francis la tutela de sus dos hijos, lo cual fue como se demostró una elección acertada ya que la generosidad y el afecto del padre Francis hacia los Tolkien fue inagotable, convirtiéndose para ellos, prácticamente, en un segundo padre, además de sostenerles económicamente y ocuparse de su educación.
Asimismo, el conferenciante destacó la influencia de Newman en Tolkien, citando un extracto de su autobiografía, Apología pro vita sua, donde el cardenal Newman enuncia un postulado en virtud del cual la literatura, filosofía y mitología paganas, rectamente entendidas, no eran más que la preparación para el Evangelio. Y es precisamente esta idea fundamental la que recoge Tolkien en su ensayo titulado Sobre los “cuentos de hadas” (“On Fairy-Stories”). En él, Tolkien acuña el término eucatástrofe, que se construye en oposición al término catástrofe, como final fatal o desenlace calamitoso de la tragedia griega. Según Tolkien, el nacimiento de Cristo es la eucatástrofe de la historia del Hombre y la Resurrección es la eucatástrofe de la historia de la Encarnación.
También se aventuró Méndez-Monasterio a señalar una evidente conexión con Chesterton en el capítulo IV de su libro Ortodoxia, que lleva por título “la ética en el país de los elfos”.
Otro dato que ayuda a entender muy bien la pasión con la que Tolkien vivía el catolicismo lo encontramos en su relación de amistad con C.S. Lewis, autor de las famosas Crónicas de Narnia. La influencia de Tolkien en la conversión al cristianismo de Lewis fue decisiva, tal y como reconoce él mismo en sus cartas.
Igualmente se hizo referencia a Edith, la que fuera el primer y verdadero amor de Tolkien, a su historia y a la conversión de Edith al catolicismo.
Finalmente, el conferenciante explicó que “El Señor de los Anillos” es una obra fundamentalmente religiosa y católica, encontrándose en ella una lectura profunda donde el sacrificio, la lucha contra el mal, la amistad, el amor y el coraje inundan la obra. Fueron citadas en varias ocasiones las “Cartas” de Tolkien, recopiladas por Humphrey Carpenter.
11. Cuarta conferencia.
La cuarta y última conferencia estuvo a cargo de Pilar de Arístegui, escritora, académica, pintora e hispanista, sobre el tema “Isabel I y la modernidad, señora de su libertad”.
Después de la presentación a cargo de José Pardo de Santayana, la conferenciante inició su intervención afirmando que la Reina Isabel
abrió un mundo a España, pudiendo afirmarse que su vida tuvo un gran valor cinematográfico: paz en España, entrevista con Colón,
creación de las escuelas palatinas, la 1ª Embajada permanente de España en Roma, el hospital La Latina, toma de Granada, descubrimiento de América, defensa de los derechos humanos de los indios, etc.
Recordó como el Papa S. Juan Pablo II reconoció la tarea evangelizadora de España en América, gracias a la cual gran parte de la Iglesia habla y reza en español.
El conquistador Cabeza de Vaca exclamó al contemplar las cataratas de Iguazú: “¡Santa María, cuanta belleza!”.
Entre los datos de su reinado cabe destacar: la promoción de los derechos humanos de los indios; una visión eficaz sobre el futuro de España; la promoción de la mujer; el deseo de independencia y el sentido de la libertad, como se manifestó en la Concordia
de Segovia; energía, pues se propuso no perder ni una “almena” de las que había heredado de su padre; su testamento es un modelo de su carácter; recibió un país feudal y lo condujo a la modernidad. Puso término a la Reconquista, después de ocho siglos, ocupándose no solo de los grandes problemas de la conquista de Granada, sino también de los menores: combatientes, armamento, intendencia, vino, etc.
En 1478 nació en Infante D. Juan que estaba llamado a ser el heredero, pero murió tempranamente antes de heredar, por lo que hay que suponer el dolor de la Reina Isabel como madre. Su visión de futuro la llevó a firmar en 1479 la paz con Portugal. Y supo anticiparse a las posibilidades que se abrían con el descubrimiento de América. Consolidó la unidad de España y se preocupó por la educación de la mujer creando las escuelas palatinas e incorporando a la Corte a Beatriz Galindo. Puso de manifiesto su sentido de la modernidad buscando en la Universidad de Salamanca profesores para sus hijos.
En América se fundaron 27 universidades más los colegios imperiales. Se crearon 290 hospitales y hoy 33 ciudades han sido declaradas por la UNESCO patrimonio de la humanidad (España tiene 15). Fue la España de ultramar y no unas colonias como lo fueron para los anglosajones. Los indígenas los fueron de pleno derecho y se defendió su libertad y dignidad, no obstante algunos abusos, como lo demuestra el mestizaje.
La Reina Isabel se preocupó especialmente por la sanidad creando hospitales para pobres (hombre y mujeres), prestando atención a la farmacopea y así, en Lima había 1 hospital cada 100 habitantes, mientras que en España había 1 hospital por cada 300 habitantes. Para Salvador de Madariaga no hay duda de que la Reina Isabel cumplió con los indígenas. Insistió en la importancia de la evangelización de América y como después de la conquista de Granada, su objetivo era evangelizar el Nuevo Mundo como lo demuestra los innumerables nombres españoles que hay por toda América y los nombres de los conquistadores y sus hazañas.
Y en cuanto a los derechos humanos recordó el ejército de maestros, juristas y religiosos que envió, la condición de súbditos de los indígenas, el testamento de la Reina, la prohibición de la esclavitud en el año 1500, la obligación de pagar salarios justos, descanso y condiciones de salubridad.
Finalmente recordó la obra de Fr. Junípero Serra y como Francisco de Vitoria dio origen al Derecho de Gentes en el que se reconocía la libertad como derechos inherentes a los pueblos, con independencias de Reyes y Papas.
12. Despedida.
Al terminar la comida, el presidente de la Fundación José Pardo de Santayana dijo unas palabras de agradecimiento a cuantos habían participado en las Jornadas, a los conferenciantes, al centro de espiritualidad que nos había acogido y, especialmente, a Cintia Lamela que se había encargado de la logística.